Hoy quiero hablar sobre algo un poco tabú, que por suerte ya no se está considerando como tabú. Quizá esta palabra no sea la más adecuada estos tiempos, sino más bien algo así como "vergüenza" sería lo correcto.
Se trata de los juguetes sexuales. Los sexshop siempre se consideraron tiendas donde nadie quiere que le vean comprar algo, pero por suerte hoy en día existen las tiendas online, las cuales te entregan tu producto de forma discreta.
Este artículo lo escribo tras haber leído una publicación en un periódico: https://canariasnoticias.es/2020/11/30/geishas-tu-sex-shop-en-tenerife En la cual, se habla de una nueva cantidad de productos sexuales que están llegando a los sexshop, que incluso apuestan por el uso de ingredientes ecológicos, tales como los condones veganos.
Pero, en fin, sin irme por las ramas, me voy a centrar en el punto. ¿Por qué se considera todo esto un tema tabú, aún hoy día?
Pues considero que hay varias razones biológicas, ligadas al comportamiento humano. El apareamiento entre dos sexos de toda especie es algo que, biológicamente, no es un juego. Por ello los animales (y también nosotros los humanos) somos tan selectivos. Nadie quiere acostarse con cualquiera. Las únicas personas que sí se acuestan con cualquiera lo hacen porque saben que existen métodos anticonceptivos, lo que nos lleva a la siguiente pregunta:
Si los métodos anticonceptivos están al alcance de todo el mundo, ¿por qué no se acuesta todo el mundo con todo el mundo, como hacen los simios?
La respuesta es la misma que lo que dije antes, el apareamiento no es un juego, ningún ser humano biológicamente considerará el apareamiento como un juego, por mucho que en determinadas ocasiones podamos pensar que sí lo es. Pero no lo es, porque estamos atados biológicamente a un comportamiento selectivo.
Y por ello, todo lo relacionado con el sexo seguirá siendo siempre algo a "tratar con guantes". Ya sea de una forma u otra, el mundo erótico provocará que, aunque nos interese y nos atraiga, mantengamos una cierta cautela antes de realizar una acción. La vergüenza es uno de esos actos de cautela.
En definitiva, los sex shop y sus juguetes siempre serán un poco "tabú", aunque cada vez lo sea menos.
Y nada más, este es mi razonamiento simplón. Si te ha interesado, deja un comentario, no importa si es para mostrarte en desacuerdo. ¡Exprésate líbremente!
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